jueves, 3 de marzo de 2016


IMPORTANCIA DEL CONOCIMIENTO


El mundo que nos rodea nos envía constantemente Estímulos Sensoriales que son captados por nuestros distintos órganos y que posteriormente, a través de los Cinco Sentidos, se conectan con nuestro Sistema Nervioso que los transforma en pequeños Impulsos Eléctricos que con la acción de nuestro importante órgano como lo es el Cerebro, nos permiten percibir todo nuestro entorno y los cambios que éste genera, además de poder realizar distintas acciones sobre el mismo.


Esta información la recibimos en forma constante, pudiendo seleccionar el Foco de Atención hacia la misma, pero siempre captando distintos Datos Sensoriales que son posteriormente ordenados y transformados en una Información, que puede o no ser utilizada por el individuo de acuerdo al grado de importancia que posea.

Dado que recordamos las cosas que nos suceden gracias a nuestra Memoria, esta información puede ser posteriormente Adquirida o Aprehendida y pasa a formar parte de lo que es nuestro Conocimiento, siendo considerado éste como todo conjunto de datos (es decir, información) que hemos "almacenado" en nuestra memoria para su posterior utilización o aprovechamiento.

Un caso muy práctico y fácil de entender acerca del conocimiento es nuestra Formación Educativa, teniendo distintas etapas de desarrollo que son coincidentes al Desarrollo Biológico y que son distribuidos por las distintas Edades Escolares para poder obtener el mayor potencial posible, nutriéndonos de información valiosa para nuestra vida cotidiana, comunicaciones, formación profesional y cultural, entre otros factores.

No toda información que es memorizada es un Conocimiento, ya que para ser considerado como tal, debemos hacer uso constante o específico del mismo en distintas situaciones, siendo estos factores influenciados además por las Experiencias Personales que tengamos al respecto, y teniendo una funcionalidad que le daremos para poder entender tanto al medio como a otros individuos y relacionarnos con los mismos.

El conjunto de Conocimientos, Usos y Costumbres de un grupo social determinado, que se mantienen en común y que se utilizan, representan y manifiestan en forma general, es relativo a un Conocimiento Cultural, alejándose del anteriormente mencionado, que es meramente personal y subjetivo.

 Teoría del conocimiento

La Teoría del conocimiento aristotélica

Al igual que ocurría con Platón tampoco en Aristóteles encontramos una teoría del conocimiento elaborada, aunque sí numerosos pasajes en varias de sus obras (Metafísica, Ética a Nicómaco, Tópicos, por ejemplo) que se refieren explícitamente al conocimiento analizándolo bajo distintos aspectos. El estudio de la demostración, el análisis de las características de la ciencia y sus divisiones, la determinación de las virtudes dianoéticas, etc., son algunas de las ocasiones en las que Aristóteles nos habla de una manera más específica del conocimiento y de sus características. De todo ello podemos deducir algunas de las características básicas del conocimiento tal como parece haberlo concebido Aristóteles.
Aristóteles distingue varios niveles o grados de conocimiento. El conocimiento sensible deriva directamente de la sensación y es un tipo de conocimiento inmediato y fugaz, desapareciendo con la sensación que lo ha generado. El conocimiento sensible es propio de los animales inferiores. En los animales superiores, sin embargo, al mezclarse con la memoria sensitiva y con la imaginación puede dar lugar a un tipo de conocimiento más persistente. Ese proceso tiene lugar en el hombre, generando la experiencia como resultado de la actividad de la memoria, una forma de conocimiento que, sin que le permita a los hombres conocer el porqué y la causa de los objetos conocidos, les permite, sin embargo, saber que existen, es decir, la experiencia consiste en el conocimiento de las cosas particulares:
... ninguna de las acciones sensibles constituye a nuestros ojos el verdadero saber, bien que sean el fundamento del conocimiento de las cosas particulares; pero no nos dicen el porqué de nada; por ejemplo, nos hacen ver que el fuego es caliente, pero sólo que es caliente.(Aristóteles, Metafísica, libro 1,1).
El nivel más elevado de conocimiento vendría representado por la actividad del entendimiento, que nos permitiría conocer el porqué y la causa de los objetos; este saber ha de surgir necesariamente de la experiencia, pero en la medida en que es capaz de explicar la causa de lo que existe se constituye en el verdadero conocimiento:
Por consiguiente, como acabamos de decir, el hombre de experiencia parece ser más sabio que el que sólo tiene conocimientos sensibles, cualesquiera que ellos sean: el hombre de arte lo es más que el hombre de experiencia; el operario es sobrepujado por el director del trabajo, y la especulación es superior a la práctica.(Aristóteles, Metafísica, libro 1,1).
El conocimiento sensible es, pues, el punto de partida de todo conocimiento, que culmina en el saber. Y Aristóteles distingue en la Metafísica tres tipos de saber: el saber productivo, el saber práctico y el saber contemplativo o teórico. En la Ética a Nicómaco volverá presentarnos esta división del saber, en relación con el análisis de las virtudes dianoéticas, las virtudes propias del pensamiento discursivo (diánoia). El saber productivo (episteme poietiké) que es el que tiene por objeto la producción o fabricación, el saber técnico. El saber práctico (episteme praktiké) remite a la capacidad de ordenar racionalmente la conducta, tanto pública como privada. El saber contemplativo (episteme theoretiké) no responde a ningún tipo de interés, ni productivo ni práctico, y representa la forma de conocimiento más elevado, que conduce a la sabiduría.
Dibujo coloreado de una de las cariátides del Erecteion
El punto de partida del conocimiento lo constituyen, pues, la sensación y la experiencia, que nos pone en contacto con la realidad de las sustancias concretas. Pero el verdadero conocimiento es obra del entendimiento y consiste en el conocimiento de las sustancias por sus causas y principios, entre las que se encuentra la causa formal, la esencia. Al igual que para Platón, para Aristóteles conocer, propiamente hablando, supone estar en condiciones de dar cuenta de la esencia del objeto conocido. De ahí que el conocimiento lo sea propiamente de lo universal, de la forma (o de la Idea). Pero para Aristóteles la forma se encuentra en la sustancia, no es una entidad subsistente, por lo que es absolutamente necesario, para poder captar la forma, haber captado previamente, a través de la sensibilidad, la sustancia.
El entendimiento no puede entrar en contacto directamente con la forma; cuando el hombre nace no dispone de ningún contenido mental, por lo que entendimiento no tiene nada hacia lo que dirigirse: es a través de la experiencia como se va nutriendo el entendimiento de sus objetos de conocimiento, a través de un proceso en el que intervienen la sensibilidad, la memoria y la imaginación. Mediante la acción de los sentidos, en efecto, captamos la realidad de una sustancia, de la que, mediante la imaginación, elaboramos una imagen sensible, es decir, una imagen que contiene los elementos materiales y sensibles de la sustancia, pero también los formales. Es sobre esta imagen sobre la que actúa el entendimiento, separando en ella lo que hay de material de lo formal. Aristóteles distingue dos tipos de entendimiento, el agente y el paciente; el entendimiento recibe, entra en contacto con, la imagen sensible; el entendimiento agente realiza propiamente la separación de la forma y la materia, quedándose con el elemento formal que expresa a través de un concepto en el que se manifiestan, por lo tanto, las características esenciales del objeto.
Las diferencias son, pues, considerables con Platón, tanto respecto al valor atribuido al conocimiento sensible, como respecto a la actividad misma del entendimiento que ha de ser necesariamente discursivo, siendo imposible llegar a conocer los universales a no ser mediante la inducción; además, Aristóteles rechaza explícitamente el innatismo del conocimiento, y nos lo presenta como el resultado del aprendizaje, es decir, por la coordinación racional de los elementos procedentes de la sensación, a través de la experiencia. Coinciden, sin embargo, en la consideración de que el verdadero conocimiento ha de serlo de lo universal, y no de los objetos singulares.

martes, 1 de marzo de 2016



NUEVA TEMÁTICA 
PLATAFORMA ABIERTA 



http://tematica4teoriasdelconocimientovc.blogspot.com.co/

miércoles, 3 de febrero de 2016

TEORIA DEL CONOCIMIENTO

La teoría del conocimiento hace referencia a las diferentes posturas sobre el conocimiento,es decir; se dice que la teoría del conocimiento es un tratado filosófico que nos habla del conocimiento, es decir, nos habla de un sujeto que conoce o no conoce a un objeto, a una realidad o a unos sujetos e intenta aprehenderlos, significandolos para poder relacionarse con ellos.